¿Eutanazia, hoy día?

Acortar la vida es aniquilación de la posibilidad de seguir haciendo experiencias y de la aprehensión del sentido de las experiencias.
La rentabilidad lucrativa no es un argumento, sino que es veneno para la especie humana al suprimir su creación, veneno prescrito por los médicos -probatum est.

 

 

¡Pasad el mensaje!
¡ Prohibida la imitación!

¿Cómo va a continuar esto? La eutanasia voluntaria – o eutanazia, como dicen algunos–, especialmente bajo el signo de la ola biogenética, que acaba de comenzar, figura como una de las primeras prioridades de todos los programas, y con mucho no sólo de programas de computadora con su promesa totalmente automática de eficiencia. Una luz maligna está siendo lanzada sobre una sociedad, a la que le está permitido jactarse de la aprobación voluntaria tanto de sus asesinos como de sus víctimas en el asunto de acortar la vida. Porque una sociedad está formada de seres sociales. Pero una sociedad, que ya no es capaz de distinguir entre seres sociales y su descomposición (die zwischen Wesen und Verwesung nicht mehr unterscheiden kann), debe probablemente ser en su totalidad una sociedad bastante muerta. ¿Paz a sus cenizas? Esto también sigue siendo, además de otras cosas, como una cuestión abierta dirigida al futuro y a cada uno; porque lo que hoy día todavía aparece como arabesco anecdótico cientificado (verwissenschaftlicht) alrededor de algún que otro caso de suicidio, o como una cifra de casos desconocidos debido a que ni siquiera entran en ninguna estadística que pueda llamarse más o menos respetable, es un destino de masas, por no decir un destino de clase, lo que significa: un destino deparado por mano médica y, por añadidura, debido a su ceguera  y completa esclavitud respecto a los médicos, un destino inclusive aprobado como "bueno" y "sano" por la misma gente afectada.

Y si la muerte es realmente tan sana, ni siquiera la ciencia lo sabe. Sin embargo consta que la sociedad, en todos sus componentes, quiere vivir, y alguna que otra experiencia de la que la gente es privada, o que les queda ahorrada, cuando la vida es artificialmente (lege artis) acortada por la clase médica podría, en la retrospectiva de la gente, resultar haber sido una de las experiencias más importantes en lo que se refiere a la sociedad en su conjunto en una dada situación social permanente y en una dada responsabilidad social permanente [Dauerzustaendlichkeit], y en todas partes caracterizada por la irresponsabilidad, sociedad que, si uno exceptúa la última ratio (ver arriba la llamada "última ratio", véase el así llamado "suicidio"), hoy día, es tan pobre en su toma de decisiones responsables, tan débil en la toma de riesgos, tan sobrecargada con pólizas de seguros. Pero existen también experiencias revolucionarias, sean sólo como experiencias de segunda mano. Esto en verdad no tiene nada que ver con la edad de la gente o el cansancio de la vida también de muchos adultos jóvenes. Hay una enorme, una realmente enorme diferencia entre este tipo de muerte y la pregunta de si la otra muerte, donde sea y cuando sea que encuentre a alguien, pueda ser considerada una muerte como tal, esto ni siquiera es el tema de esta disertación. Pero sí es el tema y el signum male ominis de una sociedad en la cual preguntas y consideraciones similares están surgiendo necesariamente, y no sólo en el autor de esta disertación, y es necesario que surjan si el examen de los materiales en los cuales estos hallazgos están basados, es algo serio. Para ello, y por lo demás, no se habría necesitado ni un bachillerato ni ninguna otra prueba de madurez.

Escrito Premiado (Preisschrift), tomado de :
¿Progreso o adaptación funcional ...?
Examinado, tenido por correcto y rite (aprobado)
por la Facultad Superior de Profesiones de Asistencia Social
de la Universidad de Dortmund, en el año 1999.

Notas adicionales, tomadas de la misma disertación:

Pero al respecto hay que tomar en cuenta que los médicos opinan que "un hospital psiquiátrico en el que no ocurre ningún suicidio no puede ser considerado un buen hospital" (Meyer*, según Doerner/Plog, 1990).

* Con respecto a los nombres de psiquiatras que siguen, el lector hispanoparlante puede   buscar en su país respectivo los nombres de psiquiatras eutanazistas, y no hay otros, correspondientes. No le resultará difícil encontrarlos, porque: Iatrocracia a escala mundial.

O, formulado de un modo diferente: "Una baja tasa de suicidios puede ser una indicación de una carencia de actividad terapéutica" (¡!) (Eickelmann, 1997). Kisker (1985) llama a eso: "Suicidios después de hacer un balance de vida causados por exigencias rehabilitativas excesivas ". ¿Qué se debe pensar del hecho de que terapeutas como Kisker y Eickelmann, y como terapeutas quieren por supuesto ser válidos y considerados, quieren funcionar y trabajar, sea sólo por su opción profesional respectiva, entonces, qué se debe y se tiene que pensar del hecho de que ambos, no obstante e impúdicamente, imputen la culpa de la muerte de los pacientes precisamente a aquella terapia?, Eickelmann a la terapia de los hospitales psiquiátricos, Kisker a la terapia de rehabilitación, una culpa de la muerte de pacientes por la cual, después de todo, ellos mismos, como ejecutivos y gerentes de sus instituciones han de responder, aunque no siempre ante tribunales ordinarios, como por ejemplo el notorio profesor de psiquiatría Doerner, y en el caso de que aparezcan ante los tribunales, entonces como testigos contra sus enfermeros de las salas geriátricas y de enfermedades de larga duración (véase artículos de prensa sobre esta materia). Para no olvidar, al respecto, que formaron parte de los instigadores y propagandistas más fanáticos cuando se trataba de perseguir al Colectivo Socialista de Pacientes, que como SPK, y todavía más en su continuidad como SPK/PF(H), desde hace más de 30 años, significa rechazo activo contra toda terapia y contra la visita de y a cualquier médico o trabajador social. ¡¿Por cuánto tiempo más, tales 'señoritos' seguirán y se les permitirá el seguir abusando de la paciencia de los pacientes, y cuánto tiempo más se les permitirá éstos sus jueguecitos científicos, inclusive el desencadenamiento de sus matanzas de pacientes hechas balance?, ¿y cuánto tiempo más se les permitirá burlarse de los pacientes, a menos que los pacientes mismos, y quién más en todo el mundo si no los pacientes, los paren de una vez y para siempre, luchando contra aquellos con patopráctica y con acciones eficaces?! En efecto, uno tiene la fuerte impresión de que casi no pueden esperar más tiempo para ser parados. Y fue exactamente en los tiempos de la revuelta del 68, y los pacientes como SPK no habían aparecido aún en público como lo hicieron por primera vez en 1970, que tal profesor de psiquiatría ha expresado entre sus colegas que esperaba que un estudiante rebelde le hubiere dado un porrazo; así él podría retirarse finalmente y conseguir una pensión de jubilación anticipada, y lejos de preocuparse por el daño cerebral concerniente, él viviría una vida feliz y aún más feliz, como sabía demasiado bien debido a su experiencia de primera mano como terapeuta de otros pacientes con daños cerebrales.

... ¿Reformas graduales? Es la impresión del autor que tales medidas no sólo no sirven para nada sino que también yerran el blanco intencionadamente: en vez de tratar al menos de hacer suya la materia enfermedad, "los reformadores" meten sus manos en la caja para agarrar la pasta que esperan encontrar allí. Ni los pacientes, ni su enfermedad son alcanzados por tales "reformadores", ni mucho menos la enfermedad por antonomasia, cuyo entrelazamiento y entretejimiento con el presente siempre debería concernir, al fin y al cabo, a la profesión de trabajadores sociales, por no hablar de todas las premisas teóricas e históricas de la relación entre la enfermedad y la especie humana cuya puesta en marcha todavía queda por comenzar en otros sitios, justo como nosotros mismos comenzábamos a llevar a cabo la especie humana a través de nuestros principios patoprácticos y diapáticos. En toda la literatura las posibilidades y los medios que son necesarios para tal comprensión revolucionariamente transformadora (verwandelndes Begreifen) sobre esta materia, están siendo apenas proporcionados, y esto es verdad no sólo para aquellos que desempeñan y desempeñarán su profesión en la asistencia social sino también en general y en particular. El autor opina que tanto en el presente como en el futuro, cada generación tendrá que afrontar la tarea de poner en práctica su propia nueva revolución en virtud de la fuerza de la enfermedad, y eso en una forma rapidamente creciente.

 

¡Pasad el mensaje!
¡ Hágalo usted mismo!

Desde hace al menos dos generaciones otros han dejado de hacer esto, dos generaciones, que han estado dormitando desde entonces, y precisamente desde el punto de partida del SPK, en 1965. Sin embargo, pequeñas unidades SPK (EMFs), dispersas por todo el mundo, pueden poner en práctica cosas por el estilo, y han demostrado que la liberación materialista en virtud de la fuerza de la enfermedad, puede ser llevada a cabo de un modo no espectacular haciendo una realidad libre de médicos durante los 34 años pasados, es decir, ya durante más de una generación y también en lugar de y para la segunda generación fallida. Por eso éste no es un texto de propaganda escrito a favor del SPK. El SPK ha encontrado su propio modo de reproducirse, que es propagarse a sí mismo, ya desde hace mucho tiempo, y al hacerlo así podía y puede hacerlo completamente sin necesidad de ninguna otra propaganda.


En Viena esta octavilla fue distribuída en las calles hace varios años. Esta octavilla contra la euthanazia fue respaldada con su firma por cientos de personas. Por otra parte, se produjeron ataques corporales contra el SPK/PF(Ö, Austria). En Viena existe en pleno público cierto "Centro Científico Dr. Mengele" (médico y KZ-asesino múltiple de Auschwitz). Dos muchachas (alumnas de instituto) que distribuían esta octavilla cerca del dichoso "Centro Científico Dr. Mengele", fueron atacadas con cuchillos en su garganta por su agitación contra la eutanazia. Los cinco agresores, hombres entre los veinte y treinta años, dándose como "izquierdistas socialistas", finalmente fueron enviados en ambulancia a la clínica más cercana. El hombre del cuchillo fue acompañado por policías hasta la cárcel.
¿Y las muchachas? Las muchachas apenas sufrieron dolor alguno en pleno ataque.

Lema: ¡Mejor EMFir que sufrir !. Ésta será la consigna humana.
 

PF, ¿conoces al enemigo de la especie humana,
¿esa clase caníbal que encadena la enfermedad?
Al ataque con todos los medios según Jean-Paul Sartre,
el SPK/PF(H) fue la clave para acabar con todo arquiatra.
¿Es la eutanasia solamente eu-taNA-ZIa?




Traducción:
PF/SPK EMF Colombia

Redacción final: Huber
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