Gracias a las fuerzas de la enfermedad de la revolución-cósmico-social ha fracasado la legalización del moderno eutaNAZIsmo primigeniamente médico en España. Razón: "Demasiadas protestas". Esto salvará muchas vidas. ¡AKS especial a R.N.!

¡Cread colectivos de pacientes contra la clase médica, antes de que sea demasiado tarde!

¡Hacer de la enfermedad un arma revolucionaria!

PF/SPK(H), 21.06.2011

Añadido actual: A principios de junio los obispos españoles se habían expresado unánimemente a favor de la proyectada ley eutaNAZI. Ahora han votado en contra de ella, también unánimemente, contra la misma ley. La ministra de salud está perpleja y ya no entiende el mundo.

08.07.2011

Hemos recibido la siguiente carta desde España:

Ref.: Anteproyecto Ley sobre la "muerte digna"

Ilustrísima Sra. Consejera de Sanidad de Extremadura,

Como miembro del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud usted tiene que garantizar los derechos de los ciudadanos, en el caso presente: en el contexto del Anteproyecto Ley sobre la "muerte digna" presentado por el Gobierno. El anteproyecto no suscita más que preguntas y no tiene ninguna respuesta. Me limitaré especialmente a una.

Ya el título del anteproyecto es sospechoso al referirse a un "proceso final de la vida". La constatación de un "proceso final de la vida" implica un diagnóstico y un pronóstico por parte de los médicos.

Por obligación de su cargo como Consejera de Sanidad, usted sabrá que los diagnósticos y pronósticos médicos no son de ninguna manera afirmaciones de los hechos, sino por el contrario, también según la más alta jurisdicción internacional, son meras valoraciones que no pueden ser sometidas a un examen material de los hechos. Esto tampoco se remedia con "el juicio coincidente de, al menos, otro médico que participe en la atención sanitaria", como dice el artículo 17 del anteproyecto, un "juicio" igualmente exento de todo examen material de los hechos.

En estas valoraciones médicas, que no son accesibles a un examen material de los hechos, se basa esencialmente también la "voluntad" del paciente, por lo cual la tan conjurada "autonomía del paciente" resulta ser más bien una "autonomía" engañosa, es decir de segunda mano. Usted, a lo mejor, dirá que el anteproyecto ley garantiza los derechos de las personas y que nadie está obligado a acogerse a estos derechos. El derecho que, en este caso, usted ensalzaría, es de hecho quedarse a merced de un mero juicio de valor médico y excluir a los médicos de cualquier posible responsabilidad (como dice el anteproyecto en la "exposición de los motivos") para cargar toda la responsabilidad en el paciente, -un modo alevoso por parte del anteproyecto y de los médicos de escurrir el bulto.

Los "derechos de las personas" se convierten subrepticiamente en la renuncia de todos los derechos frente a la clase médica, es decir en la renuncia de toda dignidad y autonomía por parte de los pacientes para librar a los médicos de toda responsabilidad.

El eximir por ley a los médicos de cualquier responsabilidad, como propone el anteproyecto, implica necesariamente un justitium, es decir: la detención de cualquier jurisdicción y la renuncia a toda seguridad jurídica, exactamente en esta zona de vida o muerte que requiere la máxima seguridad jurídica

El médico pronuncia la sentencia con su diagnóstico de una "enfermedad incurable" y con su "pronóstico de vida limitada en la que pueden concurrir síntomas intensos". Y es el médico quien la ejecuta al desconectar por ejemplo los soportes vitales, y todo eso supuestamente con el "consentimiento informado" del paciente, -un "consentimiento informado", que se basa en "la información disponible de su estado real de salud, sus expectativas de vida y de calidad de la misma" (artículo 5 del anteproyecto). Es decir: este supuesto "consentimiento" se basa en una "información" que no es nada más que una mera valoración y como tal no accesible a un examen material de los hechos (véase arriba).

Si este anteproyecto ley se convirtiera en una ley, significaría esto la renuncia a la tan celebrada separación de poderes; el poder tanto ejecutivo como legislativo y judicial se entregarían sin obstaculo a la clase médica. ¡Un putsch en toda regla!, por no decir: lege artis. Y un Hitler como auxiliar ejecutivo de la clase médica estará, en caso necesario, rápidamente a mano.

Para una medida de tal envergadura usted y sus colegas no están de ninguna manera autorizados. Por eso le pido remitir esta carta también a sus colegas de las otras autonomías para rechazar el presente anteproyecto ley en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud.

Si usted quiere profundizar en la temática, le recomiendo los siguientes textos que he encontrado en internet:

¡Andaluces, levantáos! contra el moderno eutaNAZIsmo primigeniamente médico
que se esconde detrás de "muerte digna" y "cuidados paliativos"!

Diapática de una resurrección. Acción colectiva contra médicos eutaNAZIs en una unidad de cuidados intensivos

DECLARACIÓN PÚBLICA. Eutanasia = Asesinato como terapia. En total: Genocidio
¿Para curar a qué? ¡Al iatrocapitalismo por supuesto!

Atentamente

R. N.

Los que quieran adherirse, aquí la dirección:

Consejera de Sanidad y Dependencia
Junta de Extremadura
consejera(a)salud.juntaextremadura.net

15.06.2011